domingo, 26 de junio de 2011

Cambiamos o No Cambiamos


Hay miles de palabras en todos los idiomas. Las palabras inventadas y usadas por Homo Sapiens por miles de años para explicar los fenómenos y noúmenos. Y habrá otras miles más en el porvenir para transmitir nuevos descubrimientos y conocimientos. El idioma es vivo igual que todos los seres vivos.
Nace, crece, sobrevive o muere.
Hay una palabra fabulosa la cual explica todo lo que nos ha rodeado, rodea y rodeará; CAMBIO.

Todo cambia. Lo único que no cambia es el propio cambio. Es decir la evolución.

Especialmente la historia de Homo Sapiens se puede explicar con una sola palabra:
El cambio.

Igual que todos los seres, el humano está cambiando, intenta cambiar voluntariamente, e incluso involuntariamente, el curso de la historia del mundo.
Cuando el humano descubrió qué es el cambio también cambió el futuro. Por ejemplo, Cuando Darwin descubrió la evolución de las especies, también provocó el advenimiento de nuevos planteamientos culturales, científicos y políticos.
Karl Marx y Friedrich Engels también descubrieron esta palabra para explicar la lucha de las clases y las sociedades. Cuando Darwin desvelaba el secreto de los linajes de las especies, Marx revelaba la historia de la sociedad basándose en el antagonismo de los estratos sociales bajo el socialismo científico.

Ambos respiraron en sus ideas principales el mismo fenómeno. Los dos explicaron todo en una palabra:

La evolución.

Darwin, con su teoría de la evolución en la naturaleza orgánica, engendró la idea de que las transformaciones de los seres vivos no se pueden atribuir a un “Creador”.
Mientras Marx desarrolló una idea de que la evolución de las sociedades humanas determinan la historia de socio-políticos y económicos.
Podemos decir que en primera teoría la evolución es una transformación involuntaria (animales y plantas), mientras en segunda teoría, Marx, sostiene que la humanidad está cada vez más consciente de para qué lucha y transforma intencionalmente las sociedades humanas.

Los dos acontecimientos datan la fecha de 1859. Los dos intentaron explicar los fenómenos con una teoría científica; es decir se pueden aplicar en cualquier tiempo, lugar y condiciones, teniendo en muy cuenta el efecto del “Cambio”. Así perdurar muchos años.
Pero en el mundo de las evoluciones nada salva del efecto del CAMBIO. En vista de lo cual, estas dos teorías de la evolución, están sometidas al cambio. Ya pierden su índole teoría científica por nuevas condiciones. Se desarrollarán nuevas teorías para explicar las nuevas transformaciones. Los nuevos científicos, no políticos, quemarán lo que ya es pretérito.

Así, sucesivamente Ave Fénix renacerá de sus cenizas después de haber ardido.

Por ejemplo, a la luz de los nuevos descubrimientos científicos, ya no podemos decir que la evolución de las especies supedite únicamente a los cambios de su entorno.
Ya que, el humano, jugando a ser “CREADOR”, está creando nuevas especies o cambiando sus genes. Los transgenicos, los clones ya son nuevas realidades de la naturaleza.
El científico Craig Venter creó, en mayo de 2010, una célula bacteriana con el genoma artificial. Para mí, él es el primer “dios humano”.


Lo mismo pasa con la teoría de Marx, ya no existen mismas definiciones y condiciones del siglo 19. Hoy por hoy, hay nuevos componentes y conceptos en la sociedad que Marx, otrora, no podía preverlos. Es necesario teorizar este nuevo fenómeno con el mismo concepto de Marx; con el concepto de cambio.
A día de hoy, los estratos de la sociedad están, generalmente, transformados en nuevos estamentos.
No podemos explicar la estructura y la relación de las sociedades con el antagonismo de los Patricios y los Plebes o con los Gremiales y con los Siervos de la gleba. Ni tienen la misma índole, los capitalistas y los proletariados de entonces, con la de hoy.
Hemos de definir los nuevos actores con los términos nuevos como el neoliberalismo y las sociedades civiles. Estos nuevos estratos tienen un espacio común. Los dos son movimientos globales y mueven en las redes informáticas.
Los actores de este antagonismo son básicamente las instituciones financieras y los movimientos sociales. Los dos grupos lidian, como un punto de pivote en el entorno del estado nación, , para torcer el brazo de otro.
Además existe un nuevo proletariado de acero que pueden trabajar en condiciones inhumanas. Los robots ya trabajan en las fabricas 24horas al día sin reclamar suficiente iluminación, sin descanso de café, sin baja medica, sin pedir aumento de salario, sin conflicto laboral etc. Son proles de cuello acero y aliados de los capitalistas ( superlumpenproleteriado). Por ejemplo, en 1981 en Fuji Facum 100 trabajadores realizaban labores diurnas, en cambio los robots producían por las noches las piezas. Eso no querían ni luz, ni airecondicionado. En 1986, Fuji implantó nuevos robots capaz de realizar montajes. Así, 63 trabajadores diurnos perdieron sus puestos. Quedaron 19 controladores de calidad y 14 administrativos y directores.

Los multinacionales, los banqueros y financieros cada vez ganan más poder a costa del detrimento de los trabajadores y campesinos.


En resumidas cuentas, hay necesidad de redefinir los nuevos conceptos y los actores de la lucha social. Pero, siempre teniendo en cuenta la palabra “Evolución”.
Los que no tienen paciencia esperando advenimiento de la evolución, eligen el término de “Revolución”. Significa la evolución acelerada.
También es una palabra derivada de “Cambio” que se pueden explicar muchos hechos, movimientos históricos y sociales con esta palabra.

La evolución prevalece en toda la sociedad y en sus agrupaciones. Tenemos que cambiar el chip para entenderla.


Por ejemplo, la soberanía (capacidad de uno para decidir sobre su futuro y los “cambios” que quiere) española también está transformándose.
El articulo 1, para.2 de la Constitución Española de 1978 dice que “ la soberanía reside en el Pueblo Español”. ¿Es así hoy?
Mi respuesta es que no es así. Ya hemos, recientemente, vivido con nuestra propia carne que la soberanía del estado español ya pertenece a una supraestado o unión. Tras el ingreso en Unión Europa, el pueblo español, más correcto debe ser el ciudadano español, ya no toma decisiones que determinan su futuro. Ya tenemos dos presidentes más, además del presidente del estado y del gobierno Español, el presidente de la Comisión Europea ( J.Durao Barroso) y el presidente del Consejo Europeo ( Herman Van Rompuy). Por otro lado, están Asuntos Exteriores de UE, el Banco Central Europeo, Tribunal de Cuentas, Tribunal de Justicia, Parlamento Europeo etc.
Incluso, ya ha cambiado el contenido de cabotaje.

Se transforma el concepto de estado-nación. En su lugar se prospera un nuevo concepto: Los estados- nacionales o de naciones (federalismo o confederalismo). La relación entre el estado y su nación ha devenido al estado y sus ciudadanos. En época de Franco, el estado quería que sus ciudadanos se identificaran como españoles y católicos. El estado y el país se interpretaba con estos dos conceptos. Hoy se interpreta con nacionales y relación laica con ciudadanos. UE es un estado de naciones o nacionales ( o intenta ser). Sus ciudadanos multinacionales pueden circular, residir y decidir libremente en cualquier terreno de la Unión. Por eso, hoy podemos ver en costa levantina los alcaldes ingleses o alemanes. Hay ediles con diferentes nacionalidades en muchos ayuntamientos. Se cambia el españolismo con la ciudadanía. Esto está pasando en muchos países. Todo está cambiando, los conceptos están evolucionando.

Es importante captar estos cambios para entender el fenómeno “Cambio” y luego reclamar nuevos “Cambios”.
Vamos a cambiar o el cambio nos evolucionará.

En este contexto, creo que una terna va a ganar( o debe ganar) importancia en la sociedad:

Moral, Amor (Patria) y Justicia.

Una terna debe ser alzada sobre la base de igualdad y laicismo.
El Amor a Patria no es un amor basado en una etnia sino es un amor igualitario que ama a su cultura, su arte, abraza igual a todos sus habitantes, mima a su fauna, su flora y su naturaleza de su país. El amor que cumple con los deberes del contrato de la ciudadanía. El amor a ser ética.
Es el amor al presente y al futuro del país.

Un abrazo fraternal,
Ergun Citlak

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